Una ilusión hecha realidad. 6ª Carrera del Euro: De San Vicente a la Catedral…Un euro, una ilusión
Como un pequeño nazareno buscando bajar la tan ansiosa rampa de la Colegiata del Salvador delante del cortejo de la Borriquita, los voluntarios de la Bolsa de Caridad llegaron a la típica plaza sevillana cargados de ilusión ante una nueva estación de penitencia. Una estación en la que no habría olor ni a incienso ni azahar, ni nazarenos, ni por supuesto sonaría la marcha de Pantión “Jesús de las Penas”, ni nuestros sentidos se deleitarían escuchando la marcha “Amarguras” mientras María Santísima de los Dolores subiría la angostada calle Placentines.